El invierno no tiene por qué detener tu actividad física, que el frío no te baje de la bici.
La humedad es el mayor transmisor de pérdida de calor. Nuestras extremidades son las partes más vulnerables al frío porque el flujo sanguíneo tiene ahí menos actividad. La cabeza y el cuello son zonas de nuestro cuerpo por donde dejamos escapar mas calor. Es conveniente repasar los artículos que nos ayudarán a estar abrigados y transpirar correctamente.

Vasta con tener en cuenta algunos consejos:

De la cabeza a los pies

CABEZA

Son muy útiles las orejeras, que consisten en unas cintas con una parte más redonda y caliente para proteger las orejas y son mejor idea que un gorro técnico debajo del casco, siempre que no haga mucho frío, porque cuando uno hace esfuerzo transpira mucho y la mejor forma de evaporar calor es por la cabeza. Tanto las orejeras como el gorro se pueden complementar con una braga de cuello, que nos protegerá también boca, nariz y nuca.

MANOS

Existen guantes de muy diferentes grosores y es buena idea que sean impermeables y de tejido parecido al neopreno, por su buena retención de calor y el buen tacto que nos permite el uso seguro de frenos y cambios.

CUERPO

PARTE SUPERIOR

Llevaremos a cabo la archiconocida teoría de las capas, precisamente para poner o quitar elementos según lo requiera la climatología.

  1. Prenda térmica interior ajustada para no crear cámaras de aire
  2. Maillot técnico que hará de puente entre el interior y el exterior para expulsar la humedad y mantenerse seco (o capa de abrigo no muy gruesa)
  3. Capa cortaviento traspirable para atajar la sensación de frío y minimizar la pérdida de calor
  4. Chubasquero fino y ligero de buena calidad para evitar la entrada de humedad y dejar salir el sudor

PARTE INFERIOR

Culote normalmente de lycra que puede ser de tirantes en lugar de uno de cintura para evitar que quede al aire la zona lumbar en alguna postura o si portamos una mochila. También podemos usar una malla de lycra o con una cara interna de forro polar fino.

PIES

Los pies sufren mucho y debemos protegerlos de las bajas temperaturas con calcetines de materiales sintéticos que no contengan algodón, hasta la rodilla para proteger mejor. Conviene mantener los pies calientes con cubrecalzados. El neopreno o similar es el tejido ideal para aislar los pies de la sensación de frío.

El algodón debe usarse sólo en el verano, es un tejido cálido en ausencia de humedad, pero cuando esta aparece, la absorbe quedando empapado, pesado y frío, robando el calor al cuerpo.

Complementos y Trucos

Además de todo lo dicho anteriormente, os dejamos aquí pequeños trucos que a nosotros nos han ido muy bien cuando el frío aprieta:

  • Usar como ropa interior bañadores en los chicos o bikinis en las chicas, ya que son prendas ajustadas que no son de algodón.
  • Llevar algodón en el botiquín, hacer una bolita redonda y ponerla en las orejas como si fueran tapones. Te protegerá del viento y te permitirá seguir oyendo.
  • Poner la ropa encima de un radiador y ponérnosla justo antes de salir.
  • Frotarse las piernas con alcohol de romero, es un vasodilatador natural y te ayuda a entrar en calor mas rápido.
  • Llevar una camiseta seca a mano para cambiarse si se va a hacer una parada larga.
  • Ponerse dos pares de calcetines y un poco de papel de periódico en la puntera y en el empeine para combatir frío y viento. También puede colocarse este papel en pecho y estómago.

El cuerpo por dentro

La hidratación es muy importante y más a la hora de hacer deporte. Conviene llevar un bidón-termo con algún líquido templado como café o sopa. También hay que llevar agua pero templada o del tiempo porque muy fría puede dañar nuestra garganta sobre todo si tragamos rápidamente. Con el frío, la sensación de sed no aparece con la misma frecuencia que cuando hace un fuerte calor, en cambio debemos beber con la misma regularidad para seguir hidratados.
Debes comer y beber mucho, ya que la temperatura exterior te hace gastar muchas calorías y las reservas de glucosa no deben resentirse.

Puesta a punto de tu bicicleta

El invierno nos obliga a hacer una revisión de nuestra bicicleta.
Consejos:

  • Revisar la presión y el desgaste del dibujo de las ruedas.
  • Comprobar el estado de las zapatas de freno.
  • Poner lubricante resistente al frío en la cadena.
  • Tener en perfecto funcionamiento las luces traseras y delanteras de la bicicleta, ya que en invierno hay menos horas de luz.
  • Se puede hacer uso de guardabarros si llueve para impedir que te manches.
  • Cubrir con un plástico el sillín de la bici si vamos a candarla en el exterior.
  • Añadir bandas reflectoras en nuestro cuadro de la bicicleta para ser vistos con más facilidad en condiciones climatológicas adversas.